“...Esa misma noche nació un bosque en la habitación de Max, y creció y creció hasta que había lianas colgando del techo y las paredes se convirtieron en el mundo entero. Y apareció un océano con un barco particular para él, y Max se marchó navegando a través del día y de la noche, entrando y saliendo por las semanas, saltándose un año...” Maurice Sendak
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